viernes, junio 24, 2011

Chapter XX: Speechless.

24/06/11
Cili Pica, Riga, Latvia. 22:49.
Mood del momento:

Julia Maksimova.

miércoles, junio 22, 2011

Stuff to do in Europe.

Estos chavales del Eurail me ponen una bonita lista en la contraparte de mi boleto con las cosas que debo darme tiempo de hacer, o esperar que me sucedan acá...


- Drink wine.

- Take soccer too seriously.

- Split your lederhosen.

- Lasso a unicorn.

- Stay awake in the sleeping car.

- Earn a degree in ale.

- Join a polka band.

- Whittle something.

- Buy touristy things.

- Milk a cow.

- Read the inside of a ticket holder.

- Use "apres ski" in a sentence.

- Get chased out of town on a goat.

- Get lost.

- Chum for mermaids in the Baltic.

- Fall in love.

- Make gargoyle faces.

- Yodel your lunch order.

- Wear a Speedo.

- Start a scepter collection.

- Miss your stop on purpose.

- Teach a bull some manners.

- Juggle leprechauns.

- Sing up for jester try-outs.

- Break dance to flamenco.

- Solve a mystery.

- Give every fellow passenger a nickname.

- Sniff out a truffle.

- Pedal backwards to market.

- Sound French.

- Sleep in a Castle.

- Visit a town you've never heard of.

- Stomp grapes.

- Pretend to understand a language.

- Climb an ancient stairway.

- Wake up not knowing what country you're in.

- Paint in a meadow.

- Stand in awe.

- Follow a trail of breadcrumbs.

- Read by candlelight.

- Wink at the conductor.

- Stop and smell the tulips.

- Eat too much fondue.

- Build a galleon.

- Have a pleasent thought.

- Skinny dip in a fjord.

- Discover an artifact.

- Invent blisterless wooden clogs.

- Watch the sunset at 150 miles per hour.

- Sleep under a tree.


No puedo decir que he arrasado con todo ni mucho menos, quedan algunas varias cosas pendientes, pero no me quejo en lo absoluto, vaya que voy bien, voy bastante bien...

martes, junio 21, 2011

Chapter XIX: Overload.

21/06/11

Daglivs Supermarket, Stockholm. 12:38.

Mood del momento:

- Un filetazo de salmon, queso mozzarela, jugos de frutas pa revivir, 2 pizzas pre horneadas y ya estufas. Pizza jaaa, me recordó aquella vez en Utrecht comprando la pizza "Diavola" extra picante por hacerle al machin mexicanazo, que de ahi en fuera no entendía ni peras ni tulipanes el holandés de la caja, pero esa intuitiva foto de un chipotle humeante y flameante llamó mi atención a primera vista. Compartí un poco de pizza en casa de Tanja con Giulia, y vaya que sacaba fuego la vaina esa, mis tripas eran un volcán mesopotámico en erupción, ella no se pudo comer ni la mitad de una rebanada, y yo casi tampoco, pero claro que tenía que aparentar lo contrario, como buen caballero azteca, aunque me arrasé con varios vasos de agua después... -


He dejado muchos huecos vacíos, aquí y allá tu sabes, ella sabe, nosotros sabemos, demasiada información que no he aterrizado durante estos días, me siento tal cual torta cubana que se le desborda todo el relleno, sin pies ni cabeza para arrancarle la primer mordida. Falta hablar sobre mi odisea en Holanda por el centro y norte del país, algunas irónicas clases de salsa en Amsterdam, de mi gran reencuentro con Evelien, y mi estadía con Tanja; mi viaje a Dinamarca donde mi tren se insertó completamente a un ferry para cruzar el charco, con todo y mi persona adentro, y las radiantes y exóticas historias en motocicleta en Christiania en Copenhagen; mi legendario viaje al norte de Noruega en la tierra llamada "Pa verdens ende", el fin del mundo en palabras comunes (y vaya que lo es), donde vi cosas espectaculares, fuera de toda concepción existente del planeta como lo conocemos, y claro, la estadía en casa de Frida con mi familia Noruega que me trataron cual un miembro mas de su fascinante morada escandinava. Noruega es impresionante, y ciertamente hay gente increíble aca afuera.


Como si eso no hubiera sido sifuciente, ayer a mi llegada Estocolmo despues de unas 6 horas en tren y me recibe Jocke y Marisa nuevamente al poner mi primer pie fuera del tren, puffff menuda sorpresa tío, se te cae el alma a los pies con cosas así, fue un encuentro de postal, algo que jamás me pasó por la mente, como si inconscientemente hubiera querido armar mi propia llegada perfecta a esta ciudad.


Nos fuimos directo un café para hacer algo de tiempo donde Marisa por fin decidió no pedir más jugo de naranja en uno de esos lugares designados para precisamente beber café. Fuimos a un bar medieval a beber cerveza medieval, de aspecto denso y obscuro y unos sobrantes grados etílicos, con unos bar tenders en sus customs medievales, donde nos alcanzó Diego y a esas alturas ya nos patinaba el coco a los tres. Sucedieron muchas cosas en esas escasas horas, jojo.


Quiero hacer unas buenas tomas de esta ciudad si el clima bien lo permite, por la noche sobretodo que ofrece vistas cautivantes y sustanciales con esas luces coloridas reflejadas en los ríos, aprovechar también el tiempo con Marisa en lo posible mientras siga de nuevo aquí haciéndole muchas cosquillas, comprar algunas postales, comer mucho, un chingo de salmón, y darme un buen ride en dos ruedas por los alrededores.


El jueves me esperan unas 17 horas de viaje en un ferry colosal para cruzar el mar báltico, con algo o mucha fiesta, champagne, barra libre y demás drogas de baja clasificación, por ser una de las fiestas nacionales de Letonia, y de esa manera llegar a lo que en su momento fue la unión soviética, algo que desde ya trato de asimilar, pues espero otro de los grandes reencuentros de ese otro lado del mini charco, sobra el briefing. Pero eso todavía es tiempo futuro, hoy es ahora, y nada más importa.


No creo poder estar al día con mis "crónicas de Narnia" aquí durante los próximos días, hay muchas cosas aquí afuera esperando que vaya a vivirlas, pero tal vez las fotografías permitidas hablen por si solas, se que lo harán, con algunos derechos de privacidad reservados.


Pd. La mocosa sueca en la fila de la caja me ve raro porque me vine en pijama, ups.


domingo, junio 19, 2011

Northern Lights.

19/06/11
Lofoten, Norway. 4:18.
Mood del momento:
Northern Lights. Something every human being MUST see once at least in their lifetime.

"Remember, that you are this universe
and this universe is yourself."

martes, junio 14, 2011

Chapter XVIII: Reasons.

14/06/11

Hamburg Hbf, 8:14.

Mood del momento:

- El norte. Siempre me gustó la idea de ir al norte, aunque ninguna razón cautivante en especial, salvo las auroras boreales y las noches blancas que se aprecian solamente en invierno. Aun asi, Escandinavia debe tener lo suyo mas allá de un puñado de vikingos depredadores. Voilá, creo que ya viene mi tren... -


Fue hoy exactamente hace un año cuando esto empezó. En ese entonces estabamos por abordar al bateaux mouche parisino con los que llegaron esa semana. Estaba incrédulo.


Y bien, hoy no es tan diferente, sigo incrédulo, y estoy de nuevo en otro punto de partida como es habitual en estas rachas, regresando al punto donde comienzan y terminan las historias. Me gustan las historias. Y mas aun contadas en carne propia. Just so tasty.


Ahora estoy totalmente seguro que las estaciones como ésta resguardan los mejores principios y finales del mundo impregnadas en murmullos en sus frías paredes, no podría ser de otra manera cuando tantos encuentros y desencuentros convergen en un mismo lugar como este con tremendas sobredosis emocionales.


Me despedí ayer de Marisa justo aquí pasando las 12 de la noche, casi en el mismo lugar donde nos encontramos el primer día, y donde casi pierde su tren por haber cambiado de andenes, jojo, pero aun así tuvimos tiempo suficiente para algunos detalles pendientes; un speech en español de último minuto y unas cuantas letras. Tiene una re-bonita caligrafía manuscrita de trazos larguísimos que bien podría ser de una duquesa Alsacea del siglo XVI. Eso habla mucho de su persona. Es psicografología en otros términos, que define su personalidad a través de su forma de escribir. Baah, sobra explicarlo.


La niña alemana que empezó siendo la de la sonrisa bonita en Paris hace un año, terminó siendo hoy la mejor sonrisa del planeta. Así nomás, y claro que lo sabe y bien puede jactarse por ello. Desde el principio esa fue la conexión con ella a decir verdad. Simplemente hay veces que la fotografía no da el ancho para atrapar esa clase de detalles como se ven desde fuera de la lente, pero bien lo intenté, snif snif.


Aunque en un principio me puso enfrente de una Heineiken cuando le pedí una cerveza alemanísima el primer día, no la culpo, ni tampoco por decirme en cada esquina que todas las catedrales en Hamburgo se llamaban St. Nicholas, aun así por tantito y le creía, pero esa sonrisa de dulce incertidumbre la delataba, y creo que con ese simple gesto me daba por bien servido durante toda esta rapsodia.


Bailarina de ballet de nacimiento y convicción, hace trazos mientras caminamos en la calle, silba muchísimas canciones diferentes todo el tiempo que nunca pude descifrar, pero que son inevitablemente contagiosas; va a los Balzac y Starbucks después de caminar por horas para comprar jugo de naranja "naturalísimo" por extrañas razones que ella misma desconoce. Tiene muchas, muchísimas cosquillas, y es de las pocas mujeres conocidas que le late también cañon Oasis.


Ohhh, y no le gustan los patos, los cisnes, las palomas, las garzas, los gansos, ni nada que tenga plumas, "pues ella teme que puede ser atacada por ellos cuando Beto los alimenta a la orilla del lago", así, con su re-bonito acento alemán en español. Nos sobraban las risas.


Pasé los cuatro días enteros en Hamburgo con ella, no esperaba menos de su dadivosa voluntad, conocí impecablemente lo que debía conocer de su tierra a pie y sobre ruedas, de lo cual no terminaría en mi escaso tiempo de escribir para hacer el recuento de los daños. Platicamos muchísimas cosas, mucho que ver con el título de ésto, razones, razones de la vida. Asi de simple, pero tan simple como complicado. De como las casualidades se hacen "causalidades", y viceversa. Universos paralelos.


El tiempo me absorbe demasiado rápido, por eso no es bueno estar de buenas, ya veo llegar mi tren, pero tenía que darme tiempo para procesar esto y traspasarlo a letras comunes y legibles.


Ahora estoy simplemente aqui parado casi por abordar, en el principio del final de mi encuentro con ella, arrastrando con estas historias compartidas, con la sensación de haber estado con ella por mucho más tiempo y de haberla conocido de toda la vida, se ha convertido indudablemente en alguien aun más especial (como diría la gente que no encuentra otra forma más precisa de definir a las personas). Pues sí, yo tampoco encuentro la manera en este momento. Es genial estar con ella.


Todo esto es parte del proceso, viajar así es a groso modo una película efímera y cronológica de tu vida, segmentada en varios ciclos que tienes que completar, pero a diferencia de crecer, estudiar, trabajar, casarte y tener hijos en la vida, viajando los ciclos se concretan en cada estación, en cada vez que bajas y subes a un otro tren, barco, avión, y llegas a una nueva estación, una y otra vez. Historias van, historias vienen. It's never enough, como lo ilustra ella sabiamente.


Se que nos volveremos a ver, y para ser concretos, eso será realmente pronto, sigo sorprendido y todavía más incrédulo por eso.


Y esque a veces también 2 trenes llegan a la misma estación.


"Lass dich verzaubern."


Me fui.


domingo, junio 05, 2011

Chapter XVII: Keep pushing.

05/06/11

Cologne, Germany. 21:18.

Mood del momento:

Fueron 2 conexiones de tren desde Estrasburgo para llegar a Colonia, en un viaje donde realmente no tuve espacio para comodidad alguna, pues el tren ya iba lleno, por lo que no alcance reservación para un asiento asignado y por lo tanto tuve que viajar tirado al suelo del vagón junto a la puerta de salida. "Pas de reservation monsieur" como olvidarlo!!


Pero no era el único, ya que a los pobres ingratos viajeros que nos tocó dicha suerte nadie nos dijo que ese día era feriado en Francia y Alemania, y todos decidieron viajar ese mismo día, y al parecer en el mismo tren que yo. Aun así, las 2 horas y cacho se pasaron rápido, más cuando viajas a casi 300km/h con panorámicas de postal y un sublime y persistente olor a café, y a la 1:05pm en punto estaba bajándome del tren como estaba previsto, y sin titubeo alguno, mi pulido instinto de supervivencia me llevó directamente al que supuse sería nuestro punto de reunión en la estación.


Esperaba este momento y esta sensación durante muchísimo tiempo, y ya saboreaba las mil maneras diferentes en las que podría ser ese reencuentro con Nicky, Anna y Giulia...


- Nicole siempre fue mi ejemplar en Paris, la mamá de los pollitos en muchos casos al tirarnos todos al traste y a la perdición en noches etílicas, pues por su estatura y carácter siempre daba de que temer a los extraños; de mis primeras amigas con las que me topé y congenié en EF al llegar cuando me fue presentada por Esteban, siendo también de las pocas testigos de mi última noche parisina cuando fui absorbido por drogas tipo C por mi delirio de despedida, y desde que puse un pie en la residencia ha sido mi mejor guía y repertorio de lo que puedo y debo esperar de los europeos/as con un tono contundente y realista.


Siempre tiene una respuesta para todo, incluso 2 o 3, además sabe impecablemente todo el flamante argot de nuestras malas palabras. Y como a toda suiza de vocación y corazón, le encantan los postres, y vaya que siempre me sorprende con algún exhuberante postre o chocolate recién horneado de sus tierras. Estuvo conmigo en malos tragos y siempre encontraba la forma de hacerme sonreir, "Come on, smile sweety", un gesto que llevé siempre grabado posteriormente, y a corto plazo ya había incorporado tácitamente en mi vida para toda ocasión. :)


Anna, una alemana de orgullo nacional como el 99% de los alemanes, sensata, sentido del humor inteligente, sarcástico y desarrollado, en donde muchas veces basta el puro contacto visual para comunicarnos sin redundancia, asi como me gusta, hospitalaria y de noblísimos gestos, divertida, no le tiene miedo a la lente, siempre tiene una cara diferente para cada foto, una de esas amigas que todos deben tener de este lado del mojadero me cae de madrecitas.


La relación con ella fue evolutiva, ya que eventualmente en EF fue tomando fuerza nuestra amistad, sobretodo en las ultimas semanas que tuvimos picnics diversos en Champ de Mars. Fue también de las testigos de mi aquella última noche haciéndole prometer que regresaría prontísimo, disculpa que ya le ofrecí en persona por mi demora, jojo.

Y no se alemán, pero si supiera creo que diría que tiene un acento muy marcado.


Giulia, mi apodada dutchie o delfie, definitivamente no es por fuera la típica holandesa, al menos no como las veía de escuincle en las etiquetas de lácteos empaquetados del súper, con grandes vestidos acampanados tejidos a mano, gorritos y canastas apañadas de queso y un molino detrás, pero tampoco es como alguna de las holandesas que he conocido antes. Diría más bien que es una versión postmoderna y vanguardista de Marilyn Monroe.


De bonitas facciones, aspecto chick, petulante, deshinibida e irreverente, es el alma del antro en toda ciudad, en toda noche, por algo debe ser manager de eventos sociales en Holanda. Definitivamente tiene un aura de gran predominio y potencial.


Por dentro tiene toda la tipica esencia holandesa y europea a grandes rasgos, pues a su relativa temprana edad es ya una mujersota independiente y sin miedos aparentes ante el mundo, rompió sus 4 paredes para viajar a donde ha querido, abre conversaciones sin miedo ni prejuicios con extraños en los bares, y claro, sabe defenderse sola aquí y allá, habiendo forjado ya una sofisticada óptica de la vida.


Y aunque en realidad no tuvimos mucho tiempo de conocernos antes, es bastante enriquecedor platicar con ella, pues tenemos perspectivas y convicciones similares, me ha dado muchas pistas de mi finalidad en este viaje que bien no he podido decifrar, "just keep pushing yourself into the limits", como bien lo dice. Y sí, a la larga esa tentación puede convertirse en una dulce adicción, una adicción de la cual estar bajo el efecto no es facil de controlar como es mi caso, por mi insaciable búsqueda de lo desconocido, del conocer y saber, y de afrontar miedos que probablemente no conozco. Ella es de las que saben perfectamente de lo que hablo, y claro está que todo esto da de que hablar con ella por horas. -


Pero bien, regresando a lo sustantivo, el encuentro con ellas en la estación fue explosivo, creo nunca vi a Nicky correr tan rápido desde nuestro primer contacto visual, ese momento significó rescatar muchas cosas de ayer que a la larga el tiempo se lleva, ninguno podía quitarse la sonrisa de encima. Salimos rebosantes de la estación, tomamos el primer taxi y nos fuimos todos al hotel, donde Nicky ya había hecho la reservación y tenía todo arreglado para rockear durísimo esa noche.


A estas alturas ya arrasamos con esta ciudad, hicimos turismo en cada lugar posible y no tan posible de Colonia, me hicieron probar platillos típicos de la región por doquier y tuve una cruda bastante crónica después de una noche de clubbing en las redondas con shots de "zambuka", intoxicación por la que no me puedo dar el lujo de volver a pasar.


Por el lado de la cultura sana, fuimos al zoológico, donde ellas se fueron vestidas como divas, (de ahi el apodo de Elfie Queen a Giulia), al museo del chocolate, y a varios monumentos locales, tuvimos constantes controversias y lecciones de alemán y de cortesía mexicana, ya que las europeas nunca aceptarán el hecho de abrirles la puerta como un gesto de cortesía, ya que "ellas lo pueden hacer", pero es y será una discusión interminable, pero aun asi, lo agradecen. ;)


Aunque debemos admitir que Guilia no pudo estacionar el coche a la primera, y tampoco sabía si ponerle Diesel o Super en la gas a su propio coche. Increíble que para llenar un tanque de gasolina aquí cuesta 90 euros, eso son unos 5 tanques llenos en Mexico, bendito sea Pemex y nuestros sindicatos (...Ok kidding).


Hoy es nuestra última noche aquí, estamos divagando de que manera cerrar con broche de oro pa no dejar cabos sueltos. Anna ya se fue ayer a su pueblo alemán por sus deberes, Nicky se va mañana después mediodía y yo probablemente me voy con Giulia manejando a Holanda para que me aviente en algunas vías del tren cerca de su pueblo. Hoy es por eso que se consuma un capitulo más aquí, y aunque estoy seguro que nos volveremos a ver, mierda, las voy a extrañar. Its time to go.


C'est la vie.