lunes, marzo 30, 2009

Como escuincle.

Bonita broma.
No recuerdo exactamente a partir de que noche comenzaste a aparecer en mis sueños, pero hoy por la mañana al despertar, ya eras parte de mí.
Ya ni cerrando los ojos dejo de mirarte.

Mierda.

Necesito un café.

miércoles, marzo 25, 2009

Intimidades pasajeras en autobús.

Muy interesante como en un momento tan accidental como ocasional puedes a la par, compartir cierta, o mucha intimidad con una persona, desconocida.

Intimidad visual.

Intimidad que finalmente gracias a mi desarrollado antipudor, me viene valiendo madres, al menos en la mayoría de los casos, ya que finalmente puedo babear la almohadita, quitarme los zapatos y desabrocharme el pantalón, estando acompañado, o no.

Pero desde el punto de vista de otra persona, de una fémina, digamos del mismo rango de edad, el esquema tiene otro enfoque, otras contradicciones y prejuicios, por lo que puede ser bastante delicado para ella compartir ese momento que implica "dormir juntos", dependiendo evidentemente de la sensibilidad de la persona en estas circunstancias. O bien, la otra cara de la moneda sería ofrecerle de tus choco krispis ranceos y entablar una amena y amistosa plática que perdure hasta el fin del recorrido.

Pero cuando no es así, específicamente, el hecho de dormir juntos en un asiento compartido en el autobús involucra muchas veces más de lo que uno puede esperar. De primera instancia, ella sabe que una vez al quedarse dormida, tratándose de un largo viaje en este caso, tendrás acceso a ver y escuchar todo de ella, desenmascarando aquellos malos hábitos o vicios narcolépticos que una no desearía compartir con un ser desconocido.

También hay veces en que al coincidir al dormir a contracara puedes percibir la mirada directa y sin escrúpulos de la otra persona en tu rostro mientras finges un profundo y deleitante sueño, y viceversa, que eventualmente se podría convertir en un coqueto juego de proporciones desafiantes.

Hasta incluso prestando la suficiente atención y con algo de paciencia puedes llegar a conocer, a descubrir ciertos secretos de lo más recóndito de su ser, ya sea por la forma de acurrucarse en el asiento, la fragilidad de su respirar entre sueños envueltos con tintas celestiales, por su forma de gesticular mientras duerme, por el proteccionismo de su territorio (que involucra indudablemente el apañamiento del descanza brazos), y algunos otros destellos delatadores de personalidad.

Todo, con el simple pero artesanal hecho de escuchar y observar.


¿O qué? ¿Hay algo más interesante que hacer al viajar?

viernes, marzo 13, 2009

Una rolita que últimamente no me he podido sacar de la mente...

"Tell me what you've seen
Was it a dream?
Was I in it?
Life seems so obscene
Until it's over
Who knows...

All I want is someone who
can fill the hole
In the life I know
In between life and death
Where there's nothing left
Do you wanna know?

You come in on your own
And you leave on your own
Forget the lovers you've known
And your friends on the road

Tell me if it's true
That I need you
You are changing
I've seen this road before
down on this floor
It is hurting me..."

lunes, marzo 02, 2009

Tantas ganas de escribir que no escribiré nada.


Hoy tengo muchas, muchísimas ganas de escribir, tantas que no tienen pies ni cabeza, que no se cómo ni por qué ni por dónde empezar, tantas ganas que algunas cosas no debería escribir, simplemente por lo que representan, para mi. Pueden romperle el encanto a ese cierto misterio que me caracteriza.

Tantas ganas que siento ese nudo en mi estómago, mi cuerpo hormiguea y mis manos tiemblan, incluso tantas que algunas cosas no encuentran la etimología en el universo, las letras ni palabras precisas para poder canalizarlas y expresarlas en este plano tangible.


Tantas cosas que mezclan diferentes sensaciones afines y opuestas al divagar por mi mente, y sin darme cuenta las transformo en extrañas gesticulaciones al solo saborearlas. Otras que, en realidad no valen la pena por haberse desfazado de tiempo y por idílicas y fantasiosas al caer en lo surreal. Una realidad muy a mi manera finalmente.


Se que no terminaría en toda la noche, solo por eso exteriorizo estas extasiadas ganas que tuve ésta noche de escribir, dejando inconexas todas estas fascinantes historias, sin guión y sin formato, dejándolas consumarse dosificadamente en éstas imágenes en la infinidad de una mente kaleidoscópica, esperando que en mis sueños me acompañen.


A dormir.


...claro, debe ser esa hipersensibilidad a la cafeína.