lunes, marzo 02, 2009

Tantas ganas de escribir que no escribiré nada.


Hoy tengo muchas, muchísimas ganas de escribir, tantas que no tienen pies ni cabeza, que no se cómo ni por qué ni por dónde empezar, tantas ganas que algunas cosas no debería escribir, simplemente por lo que representan, para mi. Pueden romperle el encanto a ese cierto misterio que me caracteriza.

Tantas ganas que siento ese nudo en mi estómago, mi cuerpo hormiguea y mis manos tiemblan, incluso tantas que algunas cosas no encuentran la etimología en el universo, las letras ni palabras precisas para poder canalizarlas y expresarlas en este plano tangible.


Tantas cosas que mezclan diferentes sensaciones afines y opuestas al divagar por mi mente, y sin darme cuenta las transformo en extrañas gesticulaciones al solo saborearlas. Otras que, en realidad no valen la pena por haberse desfazado de tiempo y por idílicas y fantasiosas al caer en lo surreal. Una realidad muy a mi manera finalmente.


Se que no terminaría en toda la noche, solo por eso exteriorizo estas extasiadas ganas que tuve ésta noche de escribir, dejando inconexas todas estas fascinantes historias, sin guión y sin formato, dejándolas consumarse dosificadamente en éstas imágenes en la infinidad de una mente kaleidoscópica, esperando que en mis sueños me acompañen.


A dormir.


...claro, debe ser esa hipersensibilidad a la cafeína.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Dahl y Saint Exupéry fueron pilotos y luego escritores. Tal vez te funcione igual.

:)